La línea de Plimsoll es una marca pintada en el casco de los barcos que indica el nivel máximo hasta donde la embarcación puede ser cargada de manera segura. Fue introducida en el siglo XIX por Samuel Plimsoll, un político británico preocupado por la seguridad marítima, ya que muchos barcos se hundían debido al exceso de carga. Gracias a esta marca, se redujeron considerablemente los accidentes causados por el sobrepeso.
Lo interesante de la línea de Plimsoll es que no es única, sino que suele incluir varias marcas, ya que el nivel permitido depende de las condiciones del mar y del tipo de agua. Por ejemplo, no es lo mismo navegar en agua dulce que en agua salada, ni en verano que en invierno, cuando el agua es más densa debido a la temperatura.
Un caso típico: un barco puede cargar más en el Mediterráneo durante el verano que en el Atlántico Norte en invierno, donde las condiciones son más duras. Las marcas, conocidas también como «marcas de francobordo», indican estas variaciones y permiten que las autoridades portuarias verifiquen que el buque cumple con las normas internacionales de seguridad.
Hoy en día, todas las embarcaciones mercantes del mundo están obligadas a tener visible la línea de Plimsoll. Es una medida simple pero vital que salva vidas y protege la carga, recordándonos que el mar, aunque es un medio de transporte fundamental, requiere de respeto y precauciones.